Sabotear el gobierno de Alberto es abrirle la puerta al regreso de Cambiemos

 

Diego Schurman: Tenemos en línea a Luis Delia, presidente de la Federación de Tierra, Vivienda y Hábitat (FTV). Buen día Luis.

Luis D’Elía: Buen día.

Diego Schurman: Ayer el “Cuervo” Andrés Larroque, el Ministro de Desarrollo de Kicillof, en una entrevista que hizo con Carlos Pagni dijo que había una pérdida de tiempo y un desperdicio de poder por parte del Presidente Alberto Fernández, en una nueva crítica decía eso del sector cristinista  hacia la figura del presidente de la Nación. ¿Vos coincidís con esa mirada discrepas con esa mirada?

Luis D’Elía: Bueno, primero me sorprende que hoy sea estrella en el programa de Carlos Pagni  lo que quiere decir dónde está poniendo La Cámpora la pauta publicitaria de YPF. Lo digo así de manera tangencial.  Por otro lado, no comparto para nada lo que dicen creo que son declaraciones absolutamente funcionales al Macrismo y, además, injustas con el Presidente de la República, Alberto Fernández. Un presidente que le ha tocado lidear con una peores situaciones de la historia Argentina: la pandemia macrista, la pandemia sanitaria, haber tenido que pagar durante un año los salarios de todas las empresas privadas del país. Algo que no le pasó, prácticamente a ningún presidente argentino, digo un hombre que le ha tocado vivir una situación tremenda con este tipo de frente interno.

Diego Schurman: Luis esto que decís de las empresas, con los famosos ATP del gobierno que colaboró a pagar los sueldos de los privados de muchas empresas Ahora, esto que dijo Larroque y lo relaciono con esto que vos decís, que Alberto Fernández  no ejerció el poder, te pregunto, ¿Debió haber ejercicio el poder con el poder económico o con el de muchas empresas que, efectivamente el Gobierno ayudó y sin embargo, ahora, remarcan, remarcan y remarcan por las dudas?

Luis D’Elía: Bueno, estamos en un programa al cuál él debería estar apoyando donde tenemos  1700 precios a los que se llama Precios Justos. Digo conducta de La Cámpora, principal beneficiaria de este Gobierno, el que ha sido permanentemente hecha por parte de su dirigente, una especie de tumor maligno del kirchnerismo. Es un error tremendo, con se sabotean a sí mismos permanentemente. Lamento mucho que esté pasando esto y lamento mucho que no se den cuenta de que están colaborando al fracaso, a la derrota, están colaborando con lo peor de la derecha reaccionaria, con críticas  injustas, además.

Diego Schurman: En algún momento, hace varios meses atrás, me había dicho algo parecido a Cristina Kirchner, en cuanto a que boicotear a Alberto Fernández,  nos conducía a un suicidio político, creo que esa fue la frase que utilizaste. ¿Vos sostenes esto o pensas que, tanto ella, como gente que le responde dentro del espacio del Frente de Todos, está en esa vocación?

Luis D’Elía: Bueno, sabotear el clima político, sabotear el Gobierno kirchnerista de Alberto, hoy es sabotear el futuro, abrirle las puertas de un regreso a Cambiemos. Yo camino por la calle y toda la gente abajo, permanentemente la gente me dice, esto es una locura. Lamentablemente generan microclima, generan conductas sectarias que hacen muchísimo daño. A ver, si viene Alberto, no viene La Cámpora después, lo que viene es lo peor de la derecha reaccionaria. Tendrían a esta altura del partido, tomar conciencia, por favor.

Diego Schurman: Vos decís Luis que esta suerte de operativo despegue, por decirlo de alguna manera, de preparado de alguna manera, no de la vice presidente y de algunos hombres que le responden el Gobierno diferenciándose de las políticas del propio Presidente de la Nación, no va a buen puerto? ¿Que ese operativo despegue no va a garantizar algún otro candidato del Frente de Todos, con alguna chance superior a la que pueda tener Alberto Fernández el 2023?

Luis D’Elía: fallecido Néstor,   Cristina reemplazó al Kirchnerismo con La Cámpora. Primer error. Una estructura heroica, fundacional, como el Kirchnerismo transversal, democrática, transformadora, feminista, la cambió por el sectarismo de La Cámpora, un sectarismo infantil, fanático, estúpido. Bueno, después propusieron a Scioli y luego lo sabotearon. Ahora, propusieron a Alberto y Alberto, en las peores circunstancias en la historia Argentina, vivió saboteado todo el tiempo. Yo no me callo mas la boca, no van a tener en mí un colaborador en silencioso del fracaso. Estas conductas de ella nos van a llevar al fracaso, al desastre electoral.

Diego Schurman: Ahora ¿no hay algo de sensatez cuando reclaman desde sector la creación de una mesa política? En todo caso, para definir las políticas y también digamos, para definir lo que van a hacer las candidaturas para el próximo año? ¿No es de sentido común, en una coalición donde hay distintos tipos de presiones, que haya una mezcla entre todos y que se sienten a evaluar qué hacer?

Luis D’Elía: Bueno, eso sería lo correcto, pero Cristina ya hace muchos años optó por ser la jefa de La Cámpora y no la Jefa del movimiento nacional y popular. Ella podría ser la jefa de todos, si quisiera. Pero lamentablemente eligió ser la jefa de un grupo reducido y sectario, así que no es la jefa de Kirchnerismo, es solo la jefa de La Cámpora. Ella asignó ese así misma ese rol. Alguien se lo tiene que decir. Yo tengo la más alta de las valoraciones  por Cristina. Creo que es un gran cuadro, el más brillante que tiene América Latina, pero no voy a hablar con ella como si hablara con una estampita. Le voy a decir lo que pienso que realmente ella tendría que parar a La Cámpora y a todos estos pibes que dicen estas pavadas, que no construyen en absoluto un clima electoral de cara al año que viene.

Diego Schurman: Está claro que le bajaron el pulgar a Alberto Fernández, porque cuando Larroque dice, como dijo ayer, recupera digamos la imagen del “pato rengo”, que es una expresión norteamericana para expresar, digamos, los últimos meses de gestión de un Presidente que se va porque no tiene reelección, así lo utiliza en Estados Unidos, pero lo hizo con Alberto Fernández, que si tiene la chance de reelección. Lo que está diciendo, al decir que es un “pato rengo” es que  es un presidente cada vez más débil en salida del poder.

Luis D’Elía: Eso es lo que se prefigura Andrés Larroque, ahora Alberto Fernández negoció la deuda de manera bastante coherente. Consiguió 106 millones de vacunas, le pagó los sueldos a todos los sectores privados durante un año y medio. Tiene en marcha 5300 Obras Públicas en el conurbano. Es conmovedora la obra pública. No tiene una sola denuncia de corrupción. Hizo 50.000 viviendas, 150.000 en ejecución a pesar de todo, hizo un montón de cosas. Intentó estabilizar la economía permanentemente y permanentemente fue saboteado desde adentro con este tipo de declaraciones realmente lamentable lo que están haciendo.

Diego Schurman: Vos decís Luis que la situación económica, que hay una deuda, una asignatura pendiente, todos sabemos lo que es la inflación y lo que corroe el bolsillo. ¿Vos decís que esto es producto de la interna?

Luis D’Elía: Tenemos 84 de inflación, 53 puntos nos dejó Macri. Mirá los dos años y medio que nos tocaron vivir por favor. Era analizar esto como si fuera un paracaidista húngaro, ¡No muchachos! Cristina, vos elegiste a Alberto. Bueno una vez que elegís a un compañero hay que bancarlo. Lo mismo hicieron con Scioli. No se puede maltratar así a los compañeros.

Diego Schurman: ¿Con Guzmán hicieron lo mismo? El otro día Guzmán, salió a hablar y lo han criticado, porque dijo que el Máximo era un niño caprichoso.

Luis D’Elía: Máximo renunció porque no estaba de acuerdo con el Fondo Monetario. Máximo te recuerdo que el primero en acordar con el Fondo los primeros años de gobierno fue tu papá, Néstor Kirchner. Él negoció dos años con el Fondo finalmente le terminó pagando 8.910 millones de dólares al Fondo gracias a un crédito de los chinos. Entonces, no hagamos trosko kirchnerismo porque el trosko kirchnerismo no existe. Hay que terminarla con esto. Mira hoy el prestigio enorme que tiene Cristina Fernández es inversamente proporcional a la bronca que hay en todos los grupos del movimiento nacional y popular que por miedo, por temor a ellos  a sanciones internas, se callan la boca. Luis D’Elía no se va a callar la boca.

Diego Schurman: Luis, gracias por compartir con nosotros.

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